Así es como es. Pero cuando Berian ganó el título mundial de 800 metros en indoor en marzo, hizo una confesión sorpresa: no había podido obtener un patrocinador oficial desde que terminó su contrato con Nike en diciembre de 2015.
Detrás de escena, sin embargo, fue más complicado New Balance había ofrecido a Berian un contrato de tres años por valor de $ 125,000 al año, pero legalmente Nike tenía seis meses para igualarlo.Lo que hizo, pero con importantes reducciones financieras si Berian se lesionó o tuvo un rendimiento inferior.
La mayoría de los atletas se mordían los labios y seguían adelante. Después de todo, ¿qué posibilidades tendrían contra un gigante corporativo? Berian, sin embargo, lanzó sus fichas con New Balance, y luego se restregó la nariz de Nike al ganar el Prefontaine Classic de la Liga Diamante en Eugene en mayo, justo arriba de la sede de la compañía en Beaverton. James Dasaolu gana una impresionante carrera de 100 metros lugar del libro en el equipo de GB para Río Leer más
La respuesta de Nike fue inmediata: bajó por la ruta legal.Un juez emitió rápidamente una prohibición temporal sobre Berian compitiendo en equipos New Balance, lo que dejó sus esperanzas de correr en las pruebas de esta semana en Estados Unidos en Eugene colgando de los cordones más finos.
Nike hace un zapato de entrenamiento popular llamado Free . Eso, irónicamente, era una cosa que no le permitía a Berian. Y entonces él luchó. Primero publicó su contrato New Balance en el sitio web Letsrun.com. Luego, hábilmente contó con el apoyo de las redes sociales y montó una campaña financiada por crowdfunding para financiar su defensa legal, que su agente Hawi Keflezighi comparó con David contra Goliat.
Ayudó, también, a las figuras principales de otras prendas deportivas marcas como Oiselle y Brooks declararon que lo que Nike llamaba procedimiento de operación estándar no era el caso.Como lo expresó Jesse Williams, el gerente de mercadotecnia deportiva de Brooks: "En 12 años que he estado en Brooks, no hemos firmado ningún atleta con un contrato con reducciones".
Rebeliones de alto perfil por los atletas no son nada nuevo. Se remontan al menos en 110 años a cuando Peter O'Connor, un ardiente nacionalista irlandés de Waterford que se vio obligado a competir por Gran Bretaña en los Juegos Olímpicos de 1906, dejó en claro sus sentimientos después de terminar segundo en el salto de longitud. En lugar de pararse en el podio, subió al poste en el que se izaba una bandera de la Unión y desplegó una gran bandera verde y dorada con las palabras Erin Go Bragh (Irlanda para siempre).
Luego estaban Tommie Smith y John Carlos en los Juegos Olímpicos de 1968 en la Ciudad de México golpeando con sus puños enguantados negros hacia el cielo para mostrar su apoyo a las Panteras Negras.Y antes de Londres 2012 había aquellos atletas que criticaron la Regla 40, que prohíbe a los atletas anunciar sus patrocinadores personales si no son también socios olímpicos oficiales.
Esto, sin embargo, era otra cosa: un atleta joven tomando en un gigante corporativo. El caso debía presentarse en el tribunal el miércoles, dos días antes del inicio de los ensayos olímpicos de EE. UU. Pero a fines de la semana pasada sucedió algo notable. Nike se echó atrás, diciendo que quería "eliminar esta distracción" para Berian.
Las razones de su conversión tardía al altruismo no están claras. Un analista estadounidense afirmó que Nike tiende a reaccionar de forma exagerada cuando ve competencia y en los EE. UU. New Balance está en marcha. Otro dijo que Nike se había fortalecido en Berian para desalentar a otros atletas en su establo de hacer lo mismo.Sea lo que sea, la respuesta de Nike convirtió lo que debería haber sido una onda menor en un remolino. Y bien podría burbujear hasta Río. Porque si Berian forma parte del equipo olímpico de EE. UU., Dado que debería haber corrido más rápido este año y el último que el campeón olímpico David Rudisha de Kenia, tendrá que vestir a Nike ya que es el patrocinador oficial. Y puede apostar que se le preguntará al respecto.
Sin embargo, su decisión de luchar tendrá repercusiones duraderas. Significa que los atletas ahora entienden mejor lo que ganan sus rivales por año y saben que, a diferencia de Nike, la mayoría de las empresas no reducirán las ganancias si no cumplen con ciertos objetivos competitivos. Ellos también conocen sus bonificaciones potenciales. Berian, por ejemplo, reveló que debía obtener otros $ 150,000 si ganaba el oro olímpico.Y eso no está más allá de los límites de la posibilidad. Berian nació y vivió en la altura, como los mejores kenianos y etíopes, y fue lo suficientemente bueno para correr 46 segundos durante 400 metros mientras estaba en la escuela secundaria. Todavía podría ser un héroe All-American en la pista y fuera de ella.
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